No hay duda: Mallorca embruja a autóctonos y a visitantes. La hermosura de su litoral salvaje, la belleza de sus aguas cristalinas, la majestuosidad de sus monumentos, la espectacularidad de la Sierra de Tramuntana… Y así, hasta un sinfín de motivos por los que enamorarnos de Mallorca. Te hemos hablado de sus impresionantes playas y calas, de los lugares más buscados para instagramear en Mallorca, de las mejores zonas para vivir en Palma (su preciosa capital),… Llegados a este punto, no podía faltar el listado de los pueblos imprescindibles para visitar en Mallorca; aquellos que no puedes dejar de contemplar tanto si estás de paso como si vives en la isla.
Como en el resto de casos, es difícil hacer una selección de los rincones indispensables en Mallorca cuando hay tanta maravilla por metro cuadrado. Para hacerlo más fácil, recurrimos a nuestros asesores inmobiliarios en Mallorca de Durendesa® . Estos son, a su entender, los pueblos más bonitos de la isla.
Los pueblos más bellos de Mallorca para visitar
La magia de la isla no entiende de estaciones. El encanto de sus pueblos y rincones está presente durante todo el año, sorprendiendo tanto a aquellos que la visitan por primera vez como a los residentes y a los turistas asiduos. No importa si estás de vacaciones de verano o si acabas de mudarte a la isla en pleno invierno. Estamos seguros de que vas a enamorarte de estos preciosos pueblos mallorquines.
Valldemossa: casitas de piedra escondidas en la Tramuntuna
Valldemossa aparece en todas las quinielas de los pueblos imprescindibles en Mallorca, siendo el mejor testigo de que la isla es mucho más que sol y playa. Este rincón situado en el oeste de la isla, a unos 20km en coche del centro de Palma, destaca por su ubicación en una pequeña colina, sus callejuelas empinadas, sus casas de piedra repletas de macetas y, sobre todo, por su impresionante Cartuja. Un lugar muy pintoresco que atrapó y atrapa a todos los que pisan sus calles. En el pasado, fue elegido por personalidades como el Archiduque Ludwig de Austria o artistas de la talla del compositor Chopin y de su mujer, la escritora George Sand. Hoy en día sigue enamorando a numerosos pintores y curiosos, que desde sus rincones captan la belleza única de sus alrededores.
Deià: el pueblo más bohemio de la isla entre mar y montaña
Sus impresionantes paisajes en medio de la Sierra de Tramuntana han atraído tradicionalmente a multitud de artistas, que caen rendidos antes sus calas, sus casas pintorescas, su artesanía, sus galerías de arte… Otro imprescindible en el que además se puede visitar la casa- museo del escritor británico Robert Graves, enterrado en la isla.
Fornalutx: pueblo medieval con bellas callejuelas adoquinadas
Este pequeño pueblo encaramado en una colina, en plena Sierra de Tramuntana, no puedes faltar en el listado de pueblos imprescindibles en Mallorca. Con plantas y flores por doquier, destaca por su estilo medieval, sus casas de piedra, sus desniveles, sus escalinatas y la belleza de sus calles adoquinadas. Está situado al norte de la isla, a unos 30km de la capital palmesana.
Pollença: la personalidad y el estilo propio
Muchos lo definen como el pueblo con mayor personalidad de Mallorca. No es para menos. Situado en el extremo norte de la isla, sorprende por estar rodeado de paisajes salvajes y rincones mágicos, a lo que añade la singularidad de tener unas tradiciones propias y un dialecto único. Sus hermosas montañas con pinos dejan paso a lugares tan característicos como el Port de Pollença y la península de Formentor, con impresionantes vistas desde el faro o el mirador.
Sóller: casas señoriales de estética francesa entre naranjos
Este precioso pueblo se ubica en un valle de naranjos, en la costa noroeste de la isla. Posee uno de los conjuntos arquitectónicos más atractivos de Mallorca, de fuerte contraste con sus alrededores. Imposible no admirar sus numerosos palacios y casas señoriales de estilo francés en cada paso. Entre sus enclaves más característicos sobresale el Port de Sóller, un puerto natural y turístico de un encanto extraordinario.
Otros pueblos mallorquines de gran belleza que no puedes perder de vista son Orient, Capdepera, Banyalbufar, Port d’Andratx, Portocolom y Esporles. Te recomendamos perderte por ellos dejándote llevar por tus sentidos. Todos ellos te dejarán fascinados.
