Muchos de los contratos de alquiler en Mallorca e Ibiza estipulan la prohibición de taladrar o agujerear la pared para colgar cuadros, láminas o fotografías. Sin embargo, a todos nos gusta decorar las estancias con estos elementos que personalizan y dan tanta vida a una habitación. Afortunadamente, existen muchísimas opciones para hacerlo sin tener que echar mano del taladro y de los clavos o, incluso, utilizando otras superficies de la casa. El peso del cuadro, las características de la pared (gotelé, papel pintado…) o la apuesta por una solución más original nos indicará cuál es la más conveniente. No pierdas de vista las distintas posibilidades recopiladas por nuestros profesionales de Durendesa®. Muy útiles también si acabas de mudarte a una nueva casa en Baleares o si has pintado recientemente las paredes y quieres conservar su aspecto con cuadros sin agujerear la pared.
Colgadores de cuadros sin taladro y otras opciones
Las distintas fijaciones que te proponemos no sólo van a permitir no dejar marca en la pared (o dejarla de forma casi invisible), sino también colgar el cuadro o la lámina sin hacer ruido, sin levantar el polvo o aprovechando otras superficies.
- Cuelga fácil: estas pequeñas piezas de plástico y un clavo fino aguantan bastante peso. El orificio que deja en la pared es tan diminuto que apenas se notará cuando decidas cambiar un cuadro de posición.
- Ganchos adhesivos: un mecanismo sencillísimo de utilizar para colgar cuadros sin agujerear la pared. Se utiliza principalmente en cocinas y baños para evitar taladrar los azulejos. Solo requiere limpiar la superficie con un poco de alcohol para pegar el gancho una vez se seque. Hay apliques que llegan a aguantar hasta 7 kg de peso.
- Tiras adhesivas o de velcro: su gran ventaja es que vas a colgar los cuadros sin dejar rastro. Basta con pegar las cintas de velcro en la lámina y en la pared (puedes poner varias tiras si el objeto es más pesado). Suele ser útil para todo tipo de superficies (azulejos, paredes pintadas o barnizadas, tableros, escayola…). Al igual que con los ganchos debes limpiar bien la zona y asegurarte de presionar correctamente para garantizar la sujeción.
- Cuadros sobre estantes: una opción decorativa que deja de lado el peso, las dimensiones del cuadro o el material de la pared. Las baldas se convierten en grandes aliadas para realizar montajes originales y variados sin tener que abrir agujeros cada vez que desees un cambio.
- Cuadros sobre una librería: esta posibilidad permite también lucir las pinturas, las láminas o las fotografías sin tener que agujerear las paredes. Su combinación con otros accesorios crea rincones muy decorativos.
- Cuadros sobre el suelo: una opción muy moderna y con gran resultado visual, sobre todo cuando estamos ante piezas, fotografías o lienzos grandes.
- Cuadros sobre muebles: logra un efecto similar al recurso anterior, creando composiciones muy personales mediante la combinación de tamaños y diseños. Esta alternativa es ideal para colocar los marcos sobre un mueble y apoyados en la pared (sobre una mesa auxiliar, un aparador…).
- Vinilos: una posibilidad que no daña la superficie y con cada vez mayor uso en habitaciones, baños y cocinas. Se colocan como una pegatina y se quitan fácilmente cuando decides cambiar la decoración del hogar.
